Detente, observa y piensa... voltea hacia arriba, el cielo que nos cubre y las estrellas que lo adornan por las noches, los paisajes con miles de colores que nos impresionan al amancer y al anochecer, un cielo nublado, plantas hermosas y exóticas, animales bellisimos y raros. Piensa en todo esto y más; siempre ha estado ahí, pero no lo tomamos en cuenta, ¿qué pasaría si el ser humano desapareciera?...
La repuesta es NADA, la tierra seguiría girando, los animales viviendo, las plantas creciendo; nada pasaría, en serio hasta me atrevo a pensar que el planeta estaría mas agusto sin nosotros.
El ser humano es otro habitante en el mundo, nos creemos seres imponentes, inteligentes, poderosos... pero no somos nada, sólo polvo y ceniza, como dice la Biblia.
Las personas dicen que el universo se creó por una explosión, los seres vivos salieron de bacterias y los humanos de changos. Yo sinceramente no puedo creer ésto; solo una mente retorcida de hace años atrás se le ocurrió decir eso porque la humanidad no podía vivir con esa incógnita, piden y se les da lo que quieren.
Yo sólo pienso una cosa, ¿cómo no pueden darse cuenta que alguien mas haya de su entendimiento creo todo lo que podemos ver? Un ser supremo, un Dios lo creó todo, nada es casualidad. Por qué somos tan orgullosos y egocentricos, tanto que no podemos aceptar que hay un Dios que tiene poder y nosotros solo somos simples mortales. Solo fijense en los desastres naturales somos tan frágiles, cualquier cosa nos puede quitar la vida.
Isaias 40:6 Una voz dice: «Proclama.» «¿Y qué voy a proclamar?», respondo yo. «Que todo mortal es como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo.
Salmo 103:14-16 Él conoce nuestra condición; sabe que somos de barro.
El *hombre es como la hierba, sus días florecen como la flor del campo: sacudida por el viento, desaparece sin dejar rastro alguno.
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